El Gobierno panameño decreta el 20 de diciembre como Día de Duelo Nacional por la invasión de EEUU; familiares de las víctimas lo valoran como acto de justicia.
El presidente panameño, Laurentino Cortizo, suscribió el jueves la ley que establece que el 20 de diciembre de cada año será de descanso obligatorio, la bandera será izada a media asta en todo el país y se prohibirá la venta y consumo de licores, entre otras medidas. Todo esto en homenaje a las víctimas de la invasión militar estadounidense a Panamá ocurrida hace 32 años.
“Con la sanción de la ley saldamos una deuda con la patria, con los caídos en aquel trágico evento, a quienes recordamos con respeto, sus familiares y con todos los panameños que sentimos amor por esta tierra bendecida”, aseveró Cortizo al darle el aval a la nueva norma.
Los familiares de las víctimas en la invasión estadounidense para derrocar al régimen militar de Manuel Antonio Noriega (1968-1989) valoran que el Gobierno panameño haya hecho “justicia” al sancionar la ley que establece la fecha como Día de Duelo Nacional, aprobada el pasado 15 de febrero por la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), de mayoría oficialista.
“Es un momento de mucha emoción, porque después de 32 años de lucha incansable hemos logrado que se haga justicia con el pueblo panameño, con los que sufrimos, porque todos ese día perdimos algo”, declaró a la agencia española de noticias Efe Trinidad Ayola, de la Asociación de Familiares y Amigos de los Caídos del 20 de diciembre.
La declaración de Día de Duelo Nacional fue un largo reclamo de los familiares de las víctimas de la invasión y de grupos de derechos humanos que pedían que se llamase a reflexionar sobre los hechos ocurridos durante la invasión del 20 de diciembre de 1989, pues la conmemoración de la fecha muchas veces se diluía en medio de las compras y actividades cercanas a las celebraciones de diciembre.
Aún no se sabe con certeza en Panamá el número real de los fallecidos durante la invasión, en la que EEUU movilizó a 26 000 soldados y usó armamento de última generación para capturar a Noriega.
Fuente: Correo del Orinoco